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Foto del escritorSandra Abella

Se acabaron las vacaciones…

Llega septiembre y nos ponemos las pilas


¿Quién no se ha descontrolado un poquito en estas vacaciones?

Solemos perder un poco nuestros hábitos alimenticios, parece que si no hacemos esto, las vacaciones no saben igual... jajaja.


Pero no pasa nada, por eso septiembre es el mes perfecto para reordenar las bases de nuestra alimentación y mejorar nuestros hábitos alimenticios saludables. Nos preparamos para la vuelta al trabajo y para reiniciar los buenos hábitos de deporte y alimentación.

Nuestra piel ha estado expuesta a sol, incluso aun cuando hemos utilizado las protecciones solares, el tejido necesita un aporte extra para ayudar a sus células en su regeneración.

Así que para poder tenerla nuevamente en equilibrio debemos activar su nutrición, con alimentos que ayudaran a tener una piel radiante, entre los que destaca la levadura de cerveza, por su contenido en vitaminas del grupo B fundamentales para la conservación y salud de la piel, cabello y uñas, así como su aporte de aminoácidos esenciales, y minerales como el zinc (para el correcto estado de los tejidos de la piel) y selenio (por su papel antioxidante), o la avena, un cereal que aporta silicio, Vitamina E, minerales y fibra. Frutas y verduras de todos los colores, estarás aportado fitonutrientes antioxidantes de calidad y variedad.


Como consejo para recuperar un buen plan alimentario y pautas para el bienestar, os puedo proponer unos pequeños consejos:

  • Fraccionar la dieta en 5 comidas, con bajo contenido en calorías y potenciar el consumo de fruta y verduras frescas

  • Evita los alimentos superfluos y las comidas muy pesadas.

  • Tomar alimentos ricos en vitamina C: naranja, kiwi, pomelo, fresas, pimiento, brócoli

  • Empezar el día con un buen desayuno, lo más importante, que nos active la energía para todo el día.

  • Dormir 8 horas diarias.

  • Comer despacio y sin prisas. Aunque volvamos a la rutina del trabajo y al estrés, recordar que nuestras horas de alimentación son la base fundamental, para que nuestro organismo funciones correctamente, así que nuestras comidas se merecen su tiempo.

  • Evitar el estrés lo máximo posible.

  • Evitar optar por fritos y empanados. Y por supuesto, fuera procesados.

  • Y cada día, hacer algo de actividad física y tener una vida activa física y mentalmente.


Volviendo a comer bien, haciendo ejercicio de manera regular y respetando el tiempo de descanso que necesita nuestro cuerpo, unido a un horario bien planificado, serán las mejores herramientas para retomar un estilo de vida muy saludable.

¡Bienvenidos a casa nuevamente!




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